Jóvenes de Guanajuatillo y la Tesorera rescatan la tradición: Concurso de Altares 2025 une comunidades
Con el objetivo de preservar y revitalizar una de las tradiciones más emblemáticas de México, la empresa Minera Arian Silver puso en marcha el Concurso de Altares 2025, un evento que ha unido en un mismo propósito a las comunidades de Guanajuatillo y La Tesorera. La actividad, que congregó a 100 entusiastas alumnos de escuelas secundarias Emiliano Zapata de Guanajuatillo y la escuela secundaria Mextli de la tesorera, se convirtió en un vibrante mosaico de color, fe y memoria colectiva.
Más allá de un simple concurso, esta iniciativa se erige como un proyecto educativo y cultural profundamente significativo. Su misión central es cultivar en las nuevas generaciones el cuidado y la continuidad de las tradiciones, asegurando que la esencia de nuestra identidad no se pierda con el paso del tiempo.
Altares que narran historias
El ingenio y la dedicación de los jóvenes estudiantes se plasmaron en una deslumbrante variedad de altares. Estos no solo rindieron homenaje a figuras universales de la festividad, sino que también tejieron un puente entre el pasado y el presente. Los asistentes pudieron admirar ofrendas dedicadas a personajes históricos y artísticos de gran relevancia, como:
· Francisco Goitia, el profundo pintor zacatecano.
· El general Pánfilo Natera, figura clave en la Revolución Mexicana.
· Genaro Codina, compositor del emblemático himno “Marcha de Zacatecas”.
· Fernando Villalpando, reconocido artista plástico.
· El icónico Antonio Aguilar, “El Charro de México”.
Pero la verdadera magia radicó en cómo los alumnos también elevaron altares para honrar la memoria de personajes queridos y emblemáticos de sus propias comunidades, demostrando que la tradición vive, ante todo, en el corazón de la gente.
A través de cempasúchil, papel picado, velas, fotografías y alimentos, los estudiantes rescataron y promovieron los valores, creencias y sentimientos más puros que definen esta gran fiesta, transformando el espacio en un aula viva de patrimonio cultural.
Una tradición que no conoce de edades
Ver a jóvenes de las secundarias involucrarse con igual pasión y creatividad en la elaboración de sus disfraces y caracterizaciones dejó una clara enseñanza: la herencia cultural es un legado dinámico que se puede vivir, reinterpretar y celebrar desde la infancia hasta la adultez, creando un ciclo perpetuo de orgullo y pertenencia.
El Concurso de Altares 2025 en Guanajuatillo y La Tesorera fue, en definitiva, mucho más que una competencia. Fue una demostración palpable de que las tradiciones están en buenas manos, un emotivo recordatorio de que, cuando la comunidad y la escuela se unen, la memoria de nuestros ancestros y la alegría de nuestras fiestas perdurarán por muchas generaciones más.